miércoles, septiembre 7

Nuevos aires

Esta semana tuve la suerte de estar en contacto con muchas nuevas personas, las cuales espero que sigan formando parte de mi rutina por mucho tiempo más.
Descubrí varios puntos de vista, en diferentes temáticas, en otras palabras ABRÍ LA MENTE. Y me gustó, me gustó mucho darme cuenta de la ignorancia que tengo sobre muchísimas cosas. Creo que tomar consciencia de esto, te ayuda a querer saber más, a preocuparte por entender otras posturas y ver la realidad desde otros lugares del que la ves diariamente.
En primer lugar empecé con algo que tenia ganas hace mucho tiempo , que es la militancia. Si bien me lo estoy tomando de una forma muy tranquila.  porque soy realista, y sinceramente me falta aprender muchísimo , tengo muchas ganas de hacerlo, de buscar y generar un cambio desde mi lugar.
Después arranqué con el voluntariado en La casa del Encuentro, que es un lugar en donde ayudan a mujeres que sufren violencia de género. Ir y compartir unas horas con ellas, me hizo pensar muchísimo . Es un simple grupo de mujeres que fomentan y luchan por la igualdad, y pudieron ayudar a muchas más a salir de situaciones difíciles.  Me di cuenta que existen miles de realidades que yo, por no haberlas vivido(gracias a Dios), ignoraba. No completamente, porque todos sabemos que violencia domestica hay en muchísimos hogares, pero sostengo que si uno ve desde afuera o escucha sin adentrarse en el tema, no toma verdaderamente consciencia. Me hizo replantearme mi situación actual, y darme cuenta de los míseros problemas que tengo y tiendo a ver como enormes e insolucionables , cuando realmente, no son ni un cuarto de lo que en realidad  se pueden llamar problemas. La fortaleza que me inspiraron estas minas, me ayudó a pensar en que puedo superarlos si me lo propongo, y que pase lo que pase , siempre tengo que luchar por salir adelante. Realmente , me gustó muchísimo ir y conocerlas. Siento que crecí un poco más, que dí un paso más.
Y cada vez que uno pasa por una situación que le deja una enseñanza y le acomoda un poco las neuronas, siente esto que siento yo ahora, esa especie de renovación. Que nunca viene mal, y menos cuando sentís que tu vida se esta volviendo tan estresantemente rutinaria, como yo venia sintiendo. Siento que estoy en un proceso de cambio, de maduración, que todo lo que viene adelante es para bien, para crecimiento propio. Y la verdad que es muy bueno, es lindo sentir que vienen cosas buenas, cosas grosas, que me van a hacer crecer  y ser mejor persona. De a poco, voy cambiando prioridades, subiendo escalones a otras que estaban más abajo y que hoy en día creo mas importantes. Como preocuparme por mi futuro, ayudar a que otra persona disfrute de las mismas cosas que tengo la suerte de disfrutar diariamente y que todos nos merecemos. Ya no es tan importante el vivir para llegar al fin de semana, y pensar que ese es el mejor momento en el que veo a gente que pienso que son mis amigos, cuando en realidad todos los demás días, ni nos vemos la cara, y menos nos preguntamos como estamos. Ahora pienso que lo mejor de mi rutina, son las cosas que antes veía como irritantes. Disfruto de ir a la facu, de estar más tiempo en el 174 que en mi casa, de quedarme en casa un sábado durmiendo o mirando una película... en fin, cambie mis prioridades como dije antes. Y me siento perfecta. Gracias a mis amigos que están presentes en cada paso, y a mi familia que se bancó muchos periodos de cierta angustia y "aplastamiento" .
Siento que este año aprendí millones de cosas importantes para poner en práctica a lo largo de mi vida, y me pone muy feliz saber que todavía queda mucho por delante. Y lo mejor es verme así, tan predispuesta a recibir lo que el destino me tiene preparado.